Las cobayas se han convertido en unas mascotas bastante comunes entre los humanos, de hecho, son muy sociables y relativamente sencillas de cuidar.
En el caso de las cobayas, aunque ciertamente generan menos dificultades que otras mascotas como los perros o los gatos, es imprescindible antes de ir por una a la tienda de mascotas que conozcas un poco más sobre sus hábitos y comportamientos.
¿Cómo se comporta una cobaya?
Para tener una de estas de mascotas, te resultará muy interesante y práctico saber primero cómo es su comportamiento en su hábitat natural, de tal manera que seas capaz de reproducir esto en casa y darle una buena calidad de vida a la cobaya.
Estos pequeños animalitos suelen habitar en grupos de hasta 10 individuos, para ello hacen su madriguera en las grietas de las rocas, así se sienten más protegidos. Dentro de estos grupos siempre hay un macho y una hembra dominante.
Los machos en presencia de una hembra suelen volverse agresivos y más cuando no se han criado juntas así que si vas a agregar un nuevo miembro debes supervisar constantemente el comportamiento, esto es mucho más sencillo cuando los machos han sido castrados.
No soportan los ruidos fuertes debido a la alta sensibilidad de su sentido auditivo, cuando tienen un primer contacto con otra cobaya suelen olerse alrededor de la nariz y de la reacción de este primer encuentro dependerá si se hacen amigos o enemigos.
Pueden adaptarse muy bien a mascotas como gatos o perros y también con conejos, sin embargo, hay que asegurarse de que en efecto esa relación sea amistosa.
Hay que acostumbrarlas poco a poco al contacto con humanos, para ello conviene que a diario se les hable en tono suave al tiempo que introducimos la mano en la jaula sin hacer movimientos bruscos, en la medida que se muestre más confiada ofrecerle alimentos de la mano hasta que los coma sin temor, una vez ganada la confianza es recomendable seguir teniendo estos contactos con las cobayas para que no se desacostumbren.
Ofrécele los alimentos a primeras horas de la mañana o al finalizar la tarde ya que justo son los momentos donde presentan mayor actividad.
Como cualquier otra mascota, el sedentarismo daña su salud, por ello es importante que acondiciones un espacio amplio fuera de la jaula donde puedan salir a jugar a diario, dejando siempre la puerta de la jaula abierta para que entren y salgan cuando lo deseen, así juegan entre ellas y también con sus mascotas y además se ejercitan.
Las cobayas suelen acicalarse entre ellas con mucha frecuencia, para evitar la ingesta exagerada de pelos procura cepillarlas al menos tres veces por semana, ya que estas no pueden vomitar, evita bañarlas al menos que sea estrictamente necesario, igualmente las uñas necesitan ser cortadas cuando el desgaste no es suficiente.
Alojamientos adecuados para las cobayas
Una jaula definitivamente no es lo mejor para ellas, en todo caso puedes usarla como una parte integral de un espacio un poco más grande para que ella pueda entrar y salir a su antojo, con respecto al tamaño debe ser lo suficientemente amplia para que estas puedan colocarse de pie y desplazarse cómodamente en ella, el suelo no debe ser de rejilla.
El lugar donde habitan debe estar ventilado, sin mucho ruido, iluminado principalmente cuando se encuentran en etapa de crecimiento.
Coloca juguetes dentro de la jaula y cámbialos cada cierto tiempo, cartón, cestas de mimbre, rollos de papel higiénico, etc. y para el lecho, usa pellets de papel prensado, son los mejores y más recomendados para su salud, limpia a diario el lecho de heces y orina y cámbielo una vez a la semana.
Si va a colocarles heno que esta esté colocada en una pared lateral de la jaula y suspendida para que no se ensucie, si vas a añadir paja, puedes hacerlo en el suelo.
Hay que procurarles un refugio para que se sientan seguras, si es una caseta de madera mejor, porque en temporadas de intenso calor se mantendrán frescas, en el invierno añade un paño y estate pendiente de que no se lo coma, bajo ningún concepto coloques algodón u otro material que pueda comerse.
Los comederos deben ser distintos para el pienso y las verduras y deben ser de cerámica, preferiblemente al igual que el cuenco del agua, todos deben lavarse a diario. Aunque no necesitan vacunación alguna, si es necesario desparasitarlas al menos cada 6 meses y si tienen contacto frecuente con otras mascotas hay que hacerlo más seguido.
A partir de los 6 meses, se recomienda la castración de las cobayas para evitar peleas entre ellas.